El estadio Clemente Argentino Fernández de Oliveira, en el corazón del barrio Villa Sarita, fue escenario de una cita futbolística sin precedentes.
El 9 de mayo de 1992 pisó la cancha Diego Armando Maradona con el Campeonato del Mundo de México y el subcampeonato mundial en Italia demasiados recientes en la retina de todos. Y el presente plagado de situaciones extrafutbolísticas del ex jugador de Argentinos, Boca, Barcelona y Napoli, sólo condimentaron más las horas que el ídolo vivió por Misiones.
“Yo lo venía buscando desde hace mucho tiempo al gol desde la mitad de la cancha. Hoy lo intenté porque sabía que el tiempo se terminaba. Le había preguntado al referí y me había dicho que faltaban 4 minutos. Entonces me animé, cuando sacamos del medio, la levanté y no me quedaba cómo pegarle. Sabía que si tardaba más le daba la posibilidad al arquero de que llegue. Pero gracias a Dios le pude pegar fuerte, le pude pegar bien, con todo el pie y tuve la su La pelota entró en el arco que da a la tribuna César Napoleón Ayrault. Estaba en el arco Ayala, que había entrado en reemplazo del gran Jorge Maslowski, el arquero de Tigre de Santo Pipó.erte de que entrara…”. Lo recordó el propio Diego, en 2019